El invierno, esa época en la que un café caliente se agradece casi tanto como un billete de lotería premiado, en que la ropa se cuenta por capas y en que se puede seguir nuestro rastro siguiendo los restos de lluvia o nieve por casa, también es la época en la que mantenemos nuestras casas cerradas durante más horas.
La ventilación del hogar, de las oficinas o comercios pasan de ser un alivio, un respiro y un contacto con el exterior a convertirse en un abrir y cerrar de ventanas rápido para que “se lleve los virus” pero no el calor. Este es uno de los factores que hace que los niveles de humedad en las viviendas y locales se incremente y aparezcan las incómodas, antiestéticas e insalubres humedades, sí, el moho de las paredes.
Es cierto que las humedades pueden venir causadas por fugas de agua, filtraciones, etc. por lo que será necesario que, antes de ponerte manos a la obra, encuentres el foco del problema. Una vez has dado con el origen sigue estos sencillos pasos: frotar, frotar y frotar. Limpia profundamente la zona con productos especializados y, una vez completamente seco, vuelve a pintar la pared o el techo con pintura especial para humedades. De esta forma evitarás que vuelvan a surgir y mantendrás la zona limpia y aseada.
Por otro lado, el cambio de estación es una buena época para realizar una intensa limpieza general, ni qué decir tiene el cambio de año, aprovechando los restos de la decoración navideña que más de uno y una estaréis ya desempolvando.
Con la llegada del invierno rescatamos la ropa de abrigo, tanto para nosotros como para nuestro hogar, y es un buen momento para mover muebles, vaciar cajones y armarios y hacer limpieza de cortinas.
La lluvia ya ha comenzado a azotar nuestras ventanas con asiduidad, esta semana incluso la nieve, es el momento de realizar una limpieza en profundidad de todas las ventanas de nuestra casa, oficina, o escaparate si tienes un local comercial y evitar, de este modo, las desagradables marcas que deja la lluvia en nuestros cristales.
Y por último, y no menos importante, es aconsejable realizar una limpieza exhaustiva de nuestros radiadores. Ha llegado la hora de poner a punto la caldera, purgar los radiadores y mantenerlos limpios, ya que serán nuestros mejores amigos durante los próximos meses.
Un hogar limpio y ordenado es un hogar cálido y confortable.